Lindo patológico.

Cada vez que pienso en vos se me derriten todo los organos internos, incluyendo los ocho metros de intestino. Soy una conchuda y vos pensas que haces las cosas mal y ¡no! por favor no te sientas asi que el solo hecho de pensarlo me mantiene despierta toda la noche. Sos perfecto y tan ideal que me da asco y te extraño tanto que me tiemblan las rodillas. Las rodillas, los codos y las caderas que tanto te llaman la atención. Bailamos al ritmo de teléfonos que se rompen constantemente y familias mas complicadas que cuento chino. Nos encanta, me encanta, me encantás. Tenés esa habilidad de hacer que me brille la sonrisa en los momentos donde más llueve y pasan tsunamis por mi cabeza. Y ahora faltan casi diez y seis dias para que me estampes contra el piso de el aeropuerto de un país tan nuevo para mi como viejo para vos. Llename de moretones en forma de corazón y succiona toda la sangre que quieras que todavia estas haciendo cosas importantes y yo sigo estando muy al pedo. Y vuelvo de un lugar que me muero por mostrarte y las nubes me recuerdan a tu voz y a tu pelo y a tu cara y me muero por correr hasta allá y llenarte tanto de besos que explotarías de emoción. Yo exploto de emoción y de canillas de sangre y de viajes por hacer y de cosas que salen mal, pero vos estás ahí tan radiante que me cegás y no puedo ver nada más que lo que sentís por mi. Mi cabeza y la tuya tienen tanta sintonía que consumo químicos que te afectan a vos y a mi voz que no puedo pulir para hacerte el regalo que te prometí. Pero no importa, lo hago con amor y por eso sale bien bien bien. Mentira, sale mal, ya lo vas a ver y te vas a reir y me voy a reir por que tu risa es tan contagiosa como las pulgas entre perros. Y que te guste esto hace que todo sea más lindo, lindo como vos, lindo. Sos lindo. Y somos lindos y hacemos la pareja perfecta de freakies y quiero salir a bailar con vos y ser el centro de atención del lugar, porque es así, podemos hacer que el mundo vibre con tan solo mirarnos.